Veníamos hablando del casamiento hace algunos meses, pero me lo propuso formalmente en febrero del 2012 en vacaciones en Punta del Diablo. Fue el último día, una tarde de tormenta en medio de las rocas. Yo me puse muy nerviosa y no paraba de reírme y eso no le gustó mucho, jaja, pero obvio que enseguida dije que SÍ!!! Y a partir de ese momento nos pusimos a organizar todo para casarnos en diciembre.
Elegir el vestido no fue fácil! Lo que si tenía claro es que me lo iba a hacer con Laura Sorhuet, siempre me encantaron sus vestidos. Apenas decidimos casarnos empecé a mirar diseños en internet, hay millones!!! Pero cuando entré a la página de Pronovias, vi uno que me gustaba mucho, así que fui a ver a Laura y ella enseguida lo adaptó a mí. Me encantó su propuesta, era bien yo!!!
Para el tocado también tenía bien claro quién me lo iba a hacer: María Toucon. Le llevé una placa de brillantes de mi abuela materna que quería que formara parte de mi tocado y ella se ideó cómo armarlo. Fue algo bastante sencillo ya que no me gustan las cosas recargadas, pero que quedaba muy bien con el vestido. Al principio no estaba muy convencida de ponerme plumitas en la cabeza, tenía miedo que quedara muy de vedette, pero tanto a María como a mi mamá les encantaron cómo me quedaban desde un primer momento y yo de a poco me fui acostumbrando. Después me terminaron encantando, me daban un toque diferente, fresco y con la placa en el medio quedaban muy bien!
Los zapatos me los hice con Adriana Zambrano, eran súper cómodos pero como tenían 12 cms de taco me los tuve que cambiar por championes en la mitad de la fiesta porque los pies no me daban más, estuve días días con dolor de pantorrillas por todo lo que salté esa noche!!!
Las caravanas me las prestó Laura, la diseñadora, y además llevé un anillo espectacular de brillantes que mi abuela paterna le regaló a mi mamá cuando se comprometió con mi padre.
No lleve ni ramo ni rosario, quise seguir los pasos de mi madre y no llevar nada.en la mano.
Como hicimos la fiesta en el hotel Regency de Zonamérica, me preparé ahí mismo. Me acompañaron dos primas, una amiga y mi mamá. La pasamos muy bien entre las cinco, lo disfrutamos mucho!!
Intenté disfrutar todo al máximo, tratando de no ponerme nerviosa, pero fue inevitable no hacerlo en el momento en que se abrieron las puertas de la iglesia y me tocaba entrar del brazo de mi papá. Estábamos los dos súper nerviosos y empezamos a entrar rapidísimo hasta que el fotógrafo nos hizo señas para que fuéramos más despacio!!!
La ceremonia fue para nosotros súper emotiva. Pero sin dudas, el mejor momento fue cuando el sacerdote nos hizo ponernos de frente el uno al otro y darnos las manos para el momento del consentimiento. Marcelo casi se pone a llorar! Otro momento emotivo fue cuando el coro De Profundis cantó el Ave María, fue impresionante.
Los anillos los llevaron los hijos de una prima mía. Divinos!!! Pero estaban súper
vergonzosos así que no se animaron a subir hasta el altar.
.
Para nosotros uno de los momentos más divertidos de la fiesta fue el momento del cotillón, todos lo disfrutamos mucho!!! Habíamos comprado tanto cotillón tradicional como cotillón luminoso, por lo que había de todo un poco!
Un detalle muy lindo que tuvimos en la fiesta fue una mesa de golosinas que armo una amiga y fue el gran éxito de la noche. Le quedó divina!!! Tanto chicos como grandes la disfrutaron mucho, al punto que cuando con Marcelo quisimos comer un caramelo, ya no quedaba nada!!!
Pasaron los días y todos seguían comentando sobre la mesa de caramelos.
Es muy recomendable tener un detalle fuera de lo convencional para que todos se acuerden de tu casamiento.
A las futuras novias les aconsejo que disfruten de los preparativos al máximo! Es cierto que las 2 últimas semanas no
son fáciles ya que es cuando se terminan de coordinar los últimos detalles y en
algunos casos, como el nuestro, también es cuando los novios empiezan a mudar
sus cosas para su nuevo hogar. Por lo tanto les recomiendo empezar la licencia
por lo menos una semana antes del gran día y un punto muy importante, no fijar
despedidas de solteras para la última semana, ya que son días en los que una
termina muy cansada y tiene que tratar de descansar lo más posible.
Una vez que
llega el día del casamiento, disfrútenlo al máximo, en mi caso puedo asegurar que
esa noche fue la noche en la que más me divertí en mi vida!!!
No hay comentarios
¡Gracias por dejarnos tu mensaje!
Flor