Clau & Nati: novios de abril

Nunca habíamos visto al casamiento como una prioridad en nuestras vidas. Pero de a poco vas creciendo como pareja, vas avanzando, creando proyectos y fijándote metas, y ahí es que apareció la idea de casarnos. Estuvimos de novios un poco más de 11 años, toda una vida! desde chiquitos! Pasamos por diferentes etapas, buenas y malas. En el medio una separación de unos meses, y nos volvimos a encontrar y desde ahí no nos separamos más. Como todo grupo de amigos, una pareja muy amiga nuestra fue la primera que dió el paso, y de ahí nos dieron más ganitas. Siempre la limitante era como pagar la fiesta, pero logramos organizarnos fijando metas de ahorro y pudimos hacerla tal como lo soñamos! Respecto a la propuesta, no hubo un pedido formal, típico de las películas románticas. Más bien lo fuimos charlando (Si le preguntan al novio él sigue jurando que fui yo la que terminó teniendo la iniciativa, jeje).

Con la organización tuve mucha ayuda de Fiorella, mi hermana. Por supuesto que nuestros padres y amigos
íntimos nos hicieron el aguante, pero la ayuda diaria, de acompañar a las entrevistas, de ayudar en cada elección, fue de mi hermana. Por eso le voy a estar eternamente agradecida, se necesita de alguien en quien apoyarte en esos momentos y ella estuvo conmigo en todo.

Para el gran día me preparé en el Hotel Sheraton. Fue el regalo de bodas de dos de mis mejores amigas, Luli y Vico. La verdad, el servicio es más que recomendable. Están en todos los detalles, es de esos lugares que te hacen sentir como una reina. Para ese día quise que me acompañaran mi mamá y mi hermana.  Después fueron mi papá y mi hermano a vestirse y sacarnos las clásicas fotos familiares. A media tarde pasó mi amiga Luli a ayudarme con el tema lentes de contacto...eso sí que fue un tema! Yo no veo bien de lejos pero nunca me había animado a usar lentes de contacto. La cuestión es que nunca antes los había usado y ella fue al hotel a ayudarme a ponérmelos y darme apoyo moral! je..me negaba a no ver nada en ese día tan importante! La habitación era super grande así que no hubo problemas de espacio. El equipo completo estuvo integrado por: la peinadora (Rossi y Virginia...dos genias!), Ale (diseñadora), Mariana (tocadista), Leonel (maquillador).

Con el vestido, estuve muuucho tiempo viendo revistas de novias, blogs (como el de ustedes, de diferentes lugares), fue de lo que más me costó decidir. Fui pidiendo presupuesto a las diseñadoras que más me convencían y en la segunda entrevista que tuve, apareció la genia de Alejandra Castro. La verdad la super recomiendo, siempre de buen humor, con buena vibra y muy profesional en los suyo. Luego decidí hacerme con ella el vestido del civil. Mi hermana, mi mamá y mi suegra también se lo diseñaron con ella.

Con el tema del tocado sabía bien que era lo que me gustaba, solo que me quedaba la duda de si eso me iba a quedar bien o no, ya que no soy de usar nunca nada en la cabeza, ni vinchas ni nada raro. Así que me entrevisté con Mariana Montemurro y me encantó su trabajo. La verdad, otra genia en su rubro! Ella tiene un cuarto donde hace las pruebas y tiene todo lo que se te puede ocurrir: piedritas, plumas, piezas más antiguas...en fin. Ahí fue que elegí lo que me gustaba, me lo probó, y quedé copada! Era un tocado con piedritas, perlas, azares, todo dentro del tono champagne, ocre. El maquillaje tanto del civil como el de la fiesta estuvo a cargo del genio de Leonel Aita Mussi. La verdad que maquilla divino, deja unos ojos increíbles, y es muy divertido!

Para la entrada a la iglesia no tenía duda que iba a entrar con ramo. Y ahí también estaba bien segura que
quería algo clásico, unas ramo bien redondito y prolijo (así se lo describí a Ana Correa). A ella la conocí por Facebook cuando estaba en busca de proveedores para este tema, me gustó mucho sus trabajos, la llamé y le mandé un mail bien detallado que tenía fotos de como quería mi ramo, y me entendió perfectamente.

En el tema de los accesorios tenía bien en claro que no quería nada muy recargado. Quería cumplir con la tradición, de lo nuevo, usado, prestado y algo azul...así que un accesorio prestado fue un anillo de oro amarillo y blanco que era de mi abuela pero que se lo había regalado a mi hermana, ella me lo prestó. Me costó decidir el tema de las caravanas. Mi mamá me regaló unas perlas de cultivo que estaban preciosas. El tema es que yo perlas uso todos los días y quería salir de eso. Así que unos días antes del casamiento fui a la joyería donde mi mamá me había comprado las perlas y vi unas caravanas divinas, super originales que iban bárbaro con el vestido. Eran de marquesinas con nácar blanco, algo chiquitito y bien delicado.  También use un anillo que me regalaron mis padres de oro blanco.

Con el tema de los zapatos me dejé estar un poco y cuando salí a buscarlos nada me quedaba cómodo. Me recomendaron a María Lumaconi, y ella me izo unos re lindos y cómodos. Como yo sabía que no los iba a aguantar toda la noche, me compre unos championes color crema con plataformas, y me resultaron bárbaros!

Cuando decidimos casarnos yo quería salir a recorrer iglesias así buscábamos una que nos gustara y donde nos sintiéramos a gusto, un lugar que tuviera que ver con nosotros. Un poco más de un año antes, un domingo de pleno verano fuimos con Clau, mi hermana y mi cuñado a ver iglesias. Recorrimos más de 20. Finalmente y dudas mediante, elegimos la Parroquia Carmelitas, en el Prado. No conocíamos al párroco de allí y la verdad nos encantó su estilo. Nos casó el padre Oscar, un hombre muy cálido, descontracturado y con muy buena energía. Nos gustó mucho el estilo en que oficiaba cada ceremonia, y particularmente la nuestra la disfrutamos mucho. En la familia no hay niños chicos y en nuestro grupo de amigos tampoco hay bebes así que los anillos ya estaban con el padre Oscar cuando entre, en una almohadita divina que me hizo mi amiga Brenda, con su mamá.

Con respecto a la música de la ceremonia, luego de buscar bastante dimos con el coro New Age que nos re
gustó. Fuimos un día a la entrevista con su directora con la idea de escuchar sus grabaciones y charlar, y nos terminó cantando en vivo. Con ella elegimos los temas, que no eran los clásicos sino que era un repertorio muy variado. Para el preludio, tuvimos brindis de traviatta, enya, y over the rainbow. En la ceremonia el ave María, espectacularmente interpretada, hasta mi final, de Il Divo. Entre con Pompa y Circunstancia, en una versión preciosa y salimos con I´ll say a Little prayer.

Cuando decidimos casarnos, yo, que soy una persona muy organizada, que me gusta estar en el más mínimo detalle, me encargué de hacer una planilla comparativa entre los diferentes presupuestos. Esto lo recomiendo para las futuras novias ya que no todos incluyen los mismos ítems, por lo que una propuesta no siempre es comparable con otra. En función de esto hicimos una preselección y en la segunda recorrida a chacras visitamos la chacra La Tradición y nos encantó tanto que a los pocos días la señamos para festejar nuestro casamiento. Allí el servicio es integral, lo cual simplifica muchas cosas. Pero lo bueno es que te da la libertad de elegir otros rubros y traer lo que gustes. Elizabeth, dueña de la chacra, nos dio un trato más que amable, y el servicio de todo el personal, fue excelente.

Yo no estaba muy convencida de bailar vals pero sabíamos que a nuestras familias les iba a gustar ese momento, así que decidimos bailarlo, y finalizado este comenzamos el baile con todo, solamente cortamos media hora para la cena. Felizmente podemos decir que todo nuestro casamiento salió divino, todos se re divirtieron, tuvimos comentarios luego excelentes, esos que te llenan el alma...Lo hablamos con Clau y si tuviéramos que volver a hacerlo, repetiríamos todo una y mil veces.

Si tengo que pensar en un momento especial, no podría elegir uno, desde la previa en el hotel (yo soy muy nerviosa pero no se porqué ese día fue espectacular, todos los que nos rodearon tenían tanta buena onda que me olvidé de ponerme nerviosa..jeje),  la entrada a la iglesia con mi papa y toda la fiesta, con la gente que queremos  y nos quieren...que más se puede pedir?

El tema de la decoración lo elegí prácticamente sola, porque mi marido no tenía ni idea de eso y era un tema
que realmente no le interesaba, el siempre decía: confío en vos! y con esa frase se lavaba las manos...je De la decoración se ocupó Mariana, una persona a quien no conocía pero que se dedica a ambientar fiestas, decorar salones, iglesias, etc. Charlamos muchas veces hasta que me entendió lo que quería. La verdad que es muy profesional en lo que hace y el salón quedó divino. Nos reunimos con la organizadora de la chacra y la decoradora para trabajar en conjunto y definir ideas, y funcionó bárbaro. Los centros de mesa fueron intercalados entre altos y bajos. Con liliums, rosas y follaje. Yo quería que el salón quedara bien cálido, y ahí usamos velones dentro de farolitos de distintos tamaños blancos. Toda la decoración fue en tonos marfil, blanco y negro. Había un sector de livings, camastros, puff bien diferenciado, y las mesas. Con mi novio hicimos una mesa grande familiar rectangular, que funcionó bárbaro. Sobre la mesa principal caían caireles, rosas, en fin....nos encantó!

Con Clau pensamos en que cada uno le hiciera un regalo sorpresa al otro. Mi regalo sorpresa para él se definió dos o tres días antes del casamiento. Le reservé un hotel para que hiciera la previa con sus amigos, estuvieran en la piscina, comieran algo todos juntos y compartieran un buen rato juntos.

El contrató a Los Fatales. Cuando me enteré dudé de si iba a funcionar o no...error! la gente se re copó, fue sin dudas uno de los momentos más divertidos de la fiesta.

Para recibir a los invitados contratamos a Peter Anton...yo no sé casi nada de música, pero dicen que es uno de los mejores saxofonistas de acá...y esa fama se la ganó por algo! Conocimos no solo a un excelente músico sino a un buen tipo, con ideas muy buenas, y con una energía increíble.

El recibía a la gente con temas, que iban desde Cold Play, Sinatra, Bob Marley...en fin, trabaja con pistas y da un show increíble! El luego siguió en la parte de la cena haciendo temas que elegimos juntos, paseándose de una mesa a la otra. Finalizó la cena con saxotronic...como dice la palabra, mezcla de saxo y música electrónica, con luces en el saxo. La gente se re prendió! Otras cosas originales o divertidos, fue contratar la cabina de fotos. Fue genial, no pensamos que iba a funcionar tan bien. Eso ofició como souvenir ya que cada uno que se sacaba fotos se la llevaba de recuerdo. También hubo ojotas personalizadas para las chicas...es horrible que te duelan los pies, es genial descalzarse y seguir bailoteando, así que las mujeres agradecidas!

Seguramente todas las novias digan lo mismo: que disfruten de ese día que es único!... y si. Son muchos
meses de muchas tareas, de preparación, nervios, estrés...más en los últimos que al inicio. Yo les diría que se organicen, charlen con sus parejas para definir de que se va a ocupar cada uno, así se evitan roses innecesarios. Que hagan la fiesta que a ellos les guste y no para complacer gustos de otros. Que se tomen no menos de dos o tres días antes en el trabajo, se necesita de ese tiempo así uno piense que tiene todo organizado, siempre hay imprevistos o temas que resolver y hay que llegar tranquila a la fecha de la boda.
De mi parte, lo hicimos con mucho sacrificio y dedicación. Por suerte, salió todo como habíamos imaginado. Siempre hay detalles que por más que uno intenté estar en todo se pueden escapar, lo que si interesa es que la esencia de la fiesta no se pierda, que sea una noche inolvidable junto a las personas que uno quiere. Si eso se logra, ya lo otro no interesa! Siempre lo decimos con Clau, si tuviéramos que volver a empezar, y decidir casarnos y hacer un festejo, una y mil veces haríamos lo mismo!

Por último, en todo el proceso de organización descubrí algo que no sabía que me gustaba tanto, y era todo este tema de organización en bodas. La verdad lo disfruté  un montón. Y ahí descubrí que hay infinidad de ideas y cosas para hacer, estilos de boda, que festejar el casamiento no tiene porqué implicar gastar mucho dinero...A veces se pueden lograr cosas divinas con no demasiado, esto lo digo para que aquellas parejas que piensan que casarse es un imposible porque no tiene el dinero, es un tema de darse maña, ponerle corazón, buscar ideas y ver que pueden hacer cada uno.

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Flor